Emys orbicularis | Sardegna | Marzo 2020

Son tan fuertes que lograron sobrevivir a la gran extinción masiva del período Cretácico-Paleógeno, la misma de los dinosaurios. Sin embargo, muchas especies de ellas corren el riesgo de no poder superar el Antropoceno. Las tortugas marinas nadan en un mar de plástico, entre las redes y los anzuelos de los pescadores. Las de agua dulce tienen que sobrevivir a la destrucción de su hábitat y la introducción de especies exóticas. Las de tierra se vuelven grandes solo si no terminan en algún jardín privado como mascotas o aplastados por un carro. En resumen, el homo sapiens representa un peligro por todas las especies de este planeta, ¡incluso las más fuertes!

¡Pero no todo está perdido!

Existen proyectos de protección para estos hermosos animales en todo el mundo, desde la limpieza de las playas hasta centros de recuperación. Y se puede hacer mucho incluso estando en la casa, utilizando la menor cantidad de plástico posible, evitando comprar tortugas como mascotas (especialmente si son exóticas), apoyando los proyectos de recuperación y defensa de los humedales.

El galápago europeo (Emys orbicularis en la foto) es un animal muy sensible al deterioro de su hábitat, de hecho es un bioindicador de la calidad del medio ambiente.

Cada una de mis fotos puede ser comprada impresa en calidad fine art o en lienzo, en cualquier formato.

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